Nos ha dejado Budy.

     Hace poco más de tres años que Budy llego a mi vida. No negaré que en principio era reticente a tener un perro y que mi pareja en aquel entonces fue la que me convenció para que entrase en nuestras vidas. Y lo hizo, sin duda. Hace una semana que he comenzado a escribir esta entrada y todavía la he terminado hoy. No conseguía mantenerme  entero para escribirla, así que he tardado unos días.
   
   
      En mi recuerdo, solo la pérdida de algún familiar cercano  hace ya unos años, ha dejado un vacío parecido en mi interior. Sinceramente, nunca pensé que llegase a sentir tanto su muerte.
       Budy dio un nuevo sentido a los años que compartió conmigo, despertó partes de mi que hacía tiempo que estaban dormidas e hizo de mi otra persona en este corto período de tiempo. En los innumerables paseos que dimos, algunos de varias horas, en verano e invierno, con lluvia, heladas, otros perros, otros animales y sitios desconocidos, se forjó una amistad especial, basada en la confianza, en el juego, en la compañía mutua y en una profunda admiración del uno por el otro. Budy dio nombre a este blog, a muchas cosas más, dio rienda suelta a mis ganas de escribir, a mi imaginación, me puso de nuevo en contacto con la naturaleza. El era esa parte de mi que regaña los dientes y no quiere seguir según que normas, esa parte tonta, cariñosa, juguetona y un poco salvaje, esa que aúlla y siente escalofríos,esa que nuestra "moral de bar" esconde cada día y que tanto me gusta romper. El era un perro que me hizo mas humano y espero no olvidarle nunca.

      Podría hacer un esfuerzo y escribir todo lo que brota en mi cabeza estos días  recuerdos, imágenes  momentos ...etc. Pero conseguiría jamas plasmar como es debido los sentimientos. Budy fue el ser que mas de cerca me enseñó el amor, la amistad mas sincera y la sensación de que vivía para estar con nosotros. Este era su mayor deseo, nuestra compañía. Tanto con Sole como conmigo, en su cara se reflejaba la felicidad, hasta parecía sonreír.  A pesar de las circunstancias a las que se vio sometido en su corta vida, se adaptó como nadie, en  una continua sucesión de cambios : la separación de sus " padres ", cambios de hogar, " custodia compartida ", largas horas de espera y nuevos amigos, etc. Era perfectamente sociable, de carácter desconfiado con los desconocidos y tremendamente afectuoso con los que sí conocía, juguetón y cariñoso, espabilado e inquieto, era también muy expresivo; podías entenderlo tan solo con mirarle, con sus movimientos de orejas, esas miradas curiosas y felices. Se me encoge el estómago cuando escribo esto...era en resumen, un peludo recipiente de amor, dispuesto a no dejar que derramara una lágrima en su presencia, dispuesto a que no me quedara encerrado en casa, agobiándome porque las cosas no me iban bien y dispuesto siempre a  acompañarme donde sea, cuando sea, como sea. Un pequeño lobo, blanco y castaño.
       Si existe un cielo, otro lugar donde ir cuando esto acabe, allí espero verlo. Se que estará esperándome ansioso, que querrá mordisquearme jugueteando, como hacia cuando estaba contento, se que lamerá mi cara y correteará a mi lado empujándome con sus patitas para ir a dar un paseo a un sitio lejos, juntos. Allí tendremos nuestra pequeña manada: Sibila, Sandra, Pati, Jay, Yaki, Laika, Pom, Tobi, todos esos pequeños compañeros de cuatro patas que en algún momento me han acompañado en mi vida y tal vez el tiempo que aquí no hemos tenido para estar juntos
      No me imagino un amigo mejor. Gracias por darnos tanto en tan poco tiempo, en mi  nombre y creo que en el de todos tus amigos de dos patas.

         
 

Comentarios

Entradas populares