La meditación me edita.

 Antes de comenzar este texto quiero que sepáis que lo que aquí se refleja es fruto de una investigación por la red sobre el tema, con pinceladas de mi propia experiencia y mi opinión personal, no sigo ninguna práctica concreta y ni siquiera soy capaz de concretar mi práctica...

La meditación es una práctica mental que busca cultivar la atención, la concentración y la calma. Se realiza a través de técnicas que pueden incluir la concentración en la respiración, la visualización o la repetición de mantras.

El objetivo, pues ese,  alcanzar un estado de tranquilidad y claridad mental, alejar el ruido de la mente.

La meditación tiene raíces antiguas y está presente en diversas tradiciones culturales y religiosas en todo el mundo, encontrándose en las prácticas contemplativas de las civilizaciones india, china, griega o romana. 

A sido parte integral del hinduismo, budismo, jainismo, taoismo y otras filosofías espirituales, evolucionando a través de los siglos y adoptando enfoques variados.

Sus beneficios han sido estudiados científicamente y es una práctica segura y beneficiosa para la mayor parte de las personas, pero en algunos casos puede requerir precauciones, sobre todo en casos de trastornos mentales graves o casos de traumas psicológicos no abordados.

En el contexto budista se conoce comúnmente como "bhávaná" , que viene  a significar desarrollo mental o cultivo. Otra palabra que usan es "vipassana", para referirse a una meditación específica. Es parte esencial del camino espiritual, buscando la atención plena y el desarrollo de la comprensión profunda.

En el yoga, se refieren a menudo como"dhyana" e incluyen una variedad amplia de técnicas, al igual que el budismo. La prácticas asociadas a la respiración con conocidas aquí como "pranayama".

Desde los años 70, la meditación trascendental y otros métodos orientales atrajeron la atención del público occidental y desde entonces, programas de reducción de estrés basados en la atención plena se han integrado en los entornos médicos y psicológicos, consolidándose como una herramienta para el desarrollo personal en occidente.

Del aterrizaje y expansión por occidente aparece una integración muy eficaz en la reducción del estrés, el Midfullness, en concreto programas como el MBSR (Mindfullness-Based Stress Reduction), desarrollado por el profesor Jon Kabat-Zinn.

Y hasta aquí tenemos un esquema de lo que es la meditación, para que sirve y que puede aportarnos, si solo buscamos datos.

Pero lo verdaderamente interesante, como todo en la vida, es la práctica. En ella, desde la forma mas sencilla, seremos capaces de ver algo que en muchas ocasiones ocurre, pero que no somos capaces de observar: El torrente de pensamientos, ruido de la mente, llamémosle como queramos, se manifiesta de manera relativamente rápida una vez que comenzamos la practica.

En mi caso, he elegido la respiración para centrar la atención. Los primeros intentos fueron un tanto frustrantes, por dos razones principales, una de ellas mi propia prisa por llegar a algún lugar donde creía que debía llegar y no alcanzarlo, la segunda por poner unas expectativas demasiado altas en los "resultados".

Varias prácticas después y algunos consejos de personas más experimentadas mi relación con la meditación es más "humana".

En la práctica he probado varias cosas interesantes, alguna de ellas especialmente emocionante: probé a meditar centrando mi atención en una planta, en el salón de casa con música de fondo "Chavelliers of Sangreal" de Hans Zimmer y el resultado fue una explosión de emociones al son de la música, un momento intenso con la piel de gallina y derramando lágrimas....  Puede que ese día las circunstancias en las que se movía mi mente causaron ese efecto en particular. 

Es un ejemplo de una pero coinciden todas en mostrarse como una herramienta de uso habitual, sea la  que sea nuestra experiencia en el camino. El resultado es intangible, poco podemos imaginar como nos sentiremos después de la practica, pero la sensación de apartar el fluir de pensamientos, aunque sea de manera intermitente y poder observarlos nos da una nueva perspectiva de la "realidad".

No es una vía para llegar a un lugar de donde no vuelves, se trata de una herramienta para nuestra mente, para traer la serenidad y mostrar claridad en el camino de la vida. Sus formas son de los más variadas, sus efectos, de lo más recomendables.

Aunque es posible que en nuestra exigente mente occidental siempre haya un fondo de "productividad" una "aplicación práctica", que nos lo tomemos quizás como un hito...podríamos  profundizar en ello.

Y como occidentales, conocemos la oración, el mismo camino, una herramienta parecida pero pidiendo al "Dios" exterior, al ser divino independiente. Y al igual que los religiosos, hay quien "se siente" con cierta superioridad moral por el hecho de meditar de manera habitual.

Hasta aquí mi corta, interesante y curiosa experiencia "editando me", quedaría mucho por contar, una anécdota por cada práctica, pero no hay mucho más que pueda expresar. Prueba y me cuentas!