Motoviajeros,

  Desde hace un tiempo a esta parte leo muchas entradas, videos, temas en los foros, etc, sobre los motoviajeros, esos señores y señoras que a lomos de una moto cruzan el mundo una y otra vez. En algunos les ponen a parir, otros les ensalzan y parece que no dejan indiferente a nadie. Y a mi tampoco, claro.
    Cotilleando, he visto de todo: gente con trayectoria de varios años, novatos, chicas, viajeros en ciclomotor (por que no, si los hay en bici...), un variopinto y nutrido grupo de personas que si siguen aumentando exponencialmente acabarán chocando en alguna "aventura".
    Personalmente no han generado en mi mas que una pasajera curiosidad. Los vídeos a veces son simpáticos, alguno de ellos se ve curtido y "metido en el papel", otros son menos carismáticos y mediáticos. Muchos son también escritores, pero no como yo, si no de verdad, ellos venden sus aventuras y viajes.
    En algún foro he leído a gente que les critica y a otros defenderles, yo no me veo haciendo ni una cosa ni la otra, no los conozco personalmente y no les sigo tanto como para tomar partido, solo os suelto otro rollo de los míos....

    En realidad, mientras aporreo el teclado tras  esta pantalla en estas horas muertas que tengo por trabajar la mañana de los Sábados, me gustaría estar viendo el amanecer camino de una de esas aventuras en las que cruzan el mundo, libres de carga alguna, sobre mi querida V Strom, sin mas que la búsqueda de la aventura con el transcurso de los kilómetros, por pistas interminables a lomos de mi vieja trail, por esas carreteras de costa, con interminables playas donde surfearía perfectas olas, con amaneceres y anocheceres frente al mar, ante una hoguera y una botella de ron, con esa rubia de ojos azules tocando una vieja guitarra mientras planeamos esquiar unos dias en Andorra, regresar en un crucero por el mediterráneo para volver al Caribe, al menos hasta que acabe el invierno, eso si. Entre esas, las cañas con esos amigos, las noches de fiesta, los paseos con mi mejor amigo, saltar en paracaídas y volver a coger el Kayak y la bici de montaña. Las cenas con la rubia de ojos claros, esa pasta rellena y la copa de vino...o las copas de vino...esas conversaciones interminables sobre cosas mas o menos trascendentes. La rioja, Paris, Roma, Portugal, México...y mis series favoritas...estudiar, trabajar, mi blog, buscar piedras por el monte y discutir con mi mama. Las salidas del domingo, una XT, ir al gimnasio, mi cama... Vaya! se me ha ido la pinza...Son sueños o aventuras, unas mas asequibles, otras, no tanto, pero... no quiero renunciar a ninguna y me gustaría seguir acumulando vivencias.

    Si en algo me declaro admirador de estas personas es en que han conseguido vivir su sueño, y también vivir de el, pero para vivir cada uno elige su camino y me parece innecesario criticarlos o imitarlos, no debería existir el "decálogo del aventurero", me encanta llegar a casa sintiendo que he vivido una aventura, por eso, entre otras cosas, monto en moto.

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