Tres....,dos...uno.Impacto!
Quizás por el titulo de esta entrada estáis pensando en meteoritos o algo así. Pues nada mas lejos de la realidad. Como he comentado anteriormente, me gusta pasear con mi perro por el campo (creo que nos gusta a los dos ) y observar la naturaleza, así que lo hago habitualmente por los alrededores de mi localidad. La biodiversidad que se observa en esta zona (a ojo de caminante) suelen ser aves, pequeños mamíferos, reptiles y anfibios. Desde hace un par de meses, puede que de forma adelantada por las altas temperaturas de este invierno, se observaban en las charcas multitud de puestas de anfibios, de los que he podido observar Tritón Iberico, Tritón Jaspeado, Sapo común, Salamandra común,etc. La zona se encuentra al lado de un pequeño río, y los pastos anegados estaban pululando de huevos.En ellos, para aprovechar mejor el agua, los propietarios habían cavado surcos a lo largo de la finca, y estos estaban también llenos de huevos. La verdad es que los huevos son depredados por un montón de animales, pero la naturaleza es sabia y por eso ponen tantos.
En mi paseo diario con Budy fotografié varias puestas y observaba habitualmente el estado de las charcas, ya que la escasez de lluvias me parecía el principal enemigo de tanta vida, pero cual fue mi sorpresa cuando vi cual es el enemigo real.
Una tarde cualquiera, calzado con unas botas impermeables me adentre en los campos encharcados, para ver como habían eclosionado los huevos, si podía diferenciar alguna larva y tomar unas fotos.
Nada mas llegar me lleve la primara ingrata sorpresa: la charca que estaba al lado de la carretera había sido completamente aplastada por la rueda de un autocargador de madera. No había sido la sequía, fue un señor sin darse cuenta de lo que hacia. Me dirigí entonces hacia los prados anegados, y segunda sorpresa: el propietario, a golpe de azada y supongo que para que corriese mejor el agua, había "limpiado" todos los surcos, cargándose todos los huevos y larvas que había en ellos con una eficacia demoledora...puesto que no conseguí ver ni un renacuajo allí.
Supongo que el desconocimiento y la falta de respeto por el medio (y las cosas pequeñas) hace esto, pero lo cierto es que cada paso que damos los humanos,generamos mas impacto a nuestro alrededor que ninguna otra criatura de este mundo.
En mi paseo diario con Budy fotografié varias puestas y observaba habitualmente el estado de las charcas, ya que la escasez de lluvias me parecía el principal enemigo de tanta vida, pero cual fue mi sorpresa cuando vi cual es el enemigo real.
Una tarde cualquiera, calzado con unas botas impermeables me adentre en los campos encharcados, para ver como habían eclosionado los huevos, si podía diferenciar alguna larva y tomar unas fotos.
Nada mas llegar me lleve la primara ingrata sorpresa: la charca que estaba al lado de la carretera había sido completamente aplastada por la rueda de un autocargador de madera. No había sido la sequía, fue un señor sin darse cuenta de lo que hacia. Me dirigí entonces hacia los prados anegados, y segunda sorpresa: el propietario, a golpe de azada y supongo que para que corriese mejor el agua, había "limpiado" todos los surcos, cargándose todos los huevos y larvas que había en ellos con una eficacia demoledora...puesto que no conseguí ver ni un renacuajo allí.
Supongo que el desconocimiento y la falta de respeto por el medio (y las cosas pequeñas) hace esto, pero lo cierto es que cada paso que damos los humanos,generamos mas impacto a nuestro alrededor que ninguna otra criatura de este mundo.
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