Shock, G Shock.

Siempre me han atraído las lucecitas, cual polilla nocturna me he ido fijando en todo aquello que emita luminosidad y tenga una pantalla digital debajo: relojes, móviles, smartphones, etc. Y de las cosas luminosas, las que más me llaman son las rugerizadas.
 Me resulta muy tentadora la idea de que algo no se dañe con el tiempo y el uso ( una idea que si la discutimos un rato tampoco es que tenga mucho sentido...). Y en el caso de los relojes, el máximo exponente para los que no generamos miles de k's cada mes son los Casio y dentro de ellos, la gama G Shock.


Lejos de los problemas de Shakira y Piqué, aquí estableceremos una relación duradera con un producto bien hecho y al menos hasta hace bien poco, asequible. 
La mayoría, entre los que me incluía hasta hace unos días, no tenemos ni vamos a tener ni idea de la mayor parte de las funciones que nos ofrecen los G Shock, pero si te sumerges a curiosear un poco en sus relojes te encuentras modelos bastante épicos, construídos para " ambientes" o situaciones de uso, aunque todos están muy bien dotados para resistir de todo...

Debemos tener en cuenta que no me refiero a  los últimos modelos que ya cuanhtan con con conexión al móvil mediante bluetooth, sino a las hornadas anteriores cuyos funcionamientos son autónomos, con sensores propios y mediante una configuración previa. Algunos incluso con baterías recargables por energía solar, asistidos por radiofrecuencia para el ajunte horario, barómetro, brújula, altímetro, etc sin conexión a internet y en su minúscula pantalla... Vamos, todo lo contrario de tu smartwatch.

Entre ellos tengo un amor platónico el Casio Rangeman GW-9400, con un aspecto imponente y triple sensor, carga solar y demás, pero de ese hablaremos otro día, esta vez en mi muñeca está el más económico y menos técnico Gulfman, un reloj protegido para los hombres del golfo,     que  no confundir con hombres golfos, preparado para el agua salada, con botones purgantes, trasera de titanio repelente al agua y gráficos de mareas y lunar que no he conseguido configurar todavía, cronómetro, cuenta regresiva y alarma. Poco más para un modelo al que la batería debería durarle unos 7 años ( aunque las malas lenguas dicen que sobre 10) y que lleva grabada una tortuga limpiándose el caparazón en la parte trasera, quizás de las cosas más molonas del reloj y en la que seguramente nadie se fijará.
Versiones radiocontroladas y solares sobre 160€, las que van a pila sobre unos 90€, muy recomendable si quieres algo para actividades acuáticas que no sea buceo, que para eso ya tienen los Frogman, aunque lo admite, no te preocupes.

En fin, un Casio G Shock, el reloj que quieres tener en el apocalipsis, si es que necesitas uno en esos momentos. Yo he vuelto a ellos después de años con pulseras smartband que si bien te cuentan un monton de cosas, no son lo más resistente del mundo precisamente. 


También te diré que he tenido un Calypso de 30€ y estética muy G Shock que ha aguantado de todo sin ningún mimo y su batería tiene más de 8 años. Solo la pulsera  cedió al uso. Pero no es un G Shock, no tiene titanio, ni tortuga, ni se llama Gulfman, en fin, voy a desayunar.

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